conseguir sus sueños o estar un poco mas cerca de ellos

A veces crees que lo tienes todo bajo control, que todo marcha bien, sobre la linea; que solamente escribes para contar historias, reales o que quisieses que fuesen reales, pero no son las comeduras de cabeza y las preguntas las que ocupan los reglones de ese cuaderno de cuadros azul.
Supongo que los dias pasan, constantemente, y hay dias normales y días que son merecedores de una historia, pero ese día nunca se va a repetir, nunca; lo que nos lleva a la conclusion de que todo es una sucesion de días irrepetibles y unicos, en los que uno avanza, hacia la misma direccion o por otro camino, pero constantemente nos estamos moviendo, ahora bien, lo peor que se me puede pasar por la cabeza, es tener las cosas claras, no tener nada de lo que preocuparte porque sabes a  quien tienes a tu lado y a quien no, sabes lo que piensas y lo que es merecedor de defender; y que de repente, un freno busco cambie las cosas. Que alguien te sorprenda y que te haga pensar que todo eso que has defendido se desmorone (mas o menos)
¿A que viene todo esto?
Pues bien, Ana es mi Ana y nunca va a dejar de serlo, y si me tubiese que haber metido en la pelea lo hubiese hecho, porque para eso siempre hemos estado juntas Ana, Maria y yo, desde que nos conocimos; y ayer la cosa fue a más, porque parece ser que en los domingos la gente se aburre y lo que hace es hablar. Hablar de lo que es mejor callarse, y olvidar...
Y se lo dije a Iciar, que seguía echando lecha al fuego, y que cuando juegas con fuego uno se quema y discutimos porque decía que desde que hablamos esa noche por el tema de Quique con k, habia sido muy falsa conmigo porque la caía mal, y Adriana, que esta muy cegada en ciertas cosas y tiene los ojos muy abiertos para otras, penso que Iciar y ella si que eran amigas, bueno, no, amigas no, porque Adriana siempre ha criticado a Iciar por tener tanto de mala persona, como fotos en su ordenador; pero algo eran y en el domingo de ayer que no habia nada mejor que hacer (salvo estudiar el examen catastrofico de mates de hoy) discutieron y las cosas acabaron mal. (Cosa que no me importo mucho, la verdad )
Asique despues de eso seguimos avanzado, te levantas, vas al colegio, te dan otro cuatro en física, te sale de puta pena el examen de mates, recreo, whats app, discutes con un par de profesores, campana, por fin. A la salida del colegio todo el mundo corre y saca su black berry para ver que ha pasado en esas seis horas retenido`. Pues bien, Adriana, con lo que se encuentra es con esto:

He hablado con Fran para que lo intente contigo. Te lo digo porque es mi amigo y creo que podríais estar juntos, pero sigue sin importarme lo que opines.

Iciar

Y entonces todo lo que ella habia dicho en el día anterior, todo lo que la habia criticado, todo lo que la habia llamado a su cara y espalda, todo se lo come, porque resulta, que a simple vista la mala persona habia ayudado a Adriana a conseguir sus sueños, o por lo menos a que estubiese un poco más cerca de ellos. Asique lo que tiene que hacer Adriana, que en ese momento se siente como una mierda, es dar las gracias y pedir perdon, como la señorita que nunca ha sido.

un mismo el todos los domingos

Llevo una semana sin ver a Fran, en realidad, nose porque lo escribo de esta manera, si es lo normal. Conoces a una persona una noche, ya sabes, llebaba quince años sin haberla visto; y me preocupo por dejar de verla durante siete días, también es cierto  que nunca habia conocido a un él durante una noche, que se pareciese tanto a ese él, con el que te gustaría pensar en matemáticas.
Pero es Lunes, y Adriana ya no piensa en Fran; es raro ver que en un domingo, no he tenido que pensar en un nombre diferente.
(supongo que sera porque no me acuerdo del nombre del chico de la sonrisa bonita del sabado)

Cualquier persona medio normal estaria deseando estar en mi situacion ¿verdad? No tener que pasarlo mal por nadie, parece el  plan perfeccto de nuestras vidas, o el titulo de un libro de autoayuda. Muchas de mis amigas piden un novio, pero esque yo no quiero eso.
Lo que quiero es un chico en el que pensar, solo eso, pero siempre el mismo, un él por el preocuparme cada domingo si la he cagado esa noche, un él al que buscar en la lista del chat para no atrverme a saludar, pero saber que esta ahí, conectado, y que en algún momento... cuando tengas los ovarios suficientes para saludarle, en el segundo que salga mi foto ahí, en la pantalla de su ordenador (o movil o ipod en su defecto), en ese segundo el va a estar pensando en mi, como yo harías en tantas otras horas del día.
Pero ya sabes, esto es la vida de Adriana, la misma que tiene que comprar más cerveza con limón para intentar que su pelo por fin se vuelva pelirrojo, y si piensas que es una locura, que mañana tal vez sera mejor no te molestes en volver a entrar y dale a la equis roja de la esquina derecha de la pantalla, porque este mundo siempre es asi de loco, y sino es que no es la vida de Adriana.

Me encanta como huele Manuel, y odio que no me haga caso cuando quiero que me lo haga (hoy queria que me lo hiciese) tenia que decirlo

(Lo siento Maria, hoy me ha dado esta paranoya)

aunque hayas tenido un mal dia, siempre puedes pasar una buena noche

y cuando te quieres dar cuenta la semana ya ha pasado. Adios a los diez dias con Diego, cosa de la que me alegro, porque estos diez dias me han hecho darme cuenta de que ni le quiero tanto como pensaba, ni me gusta todo lo que creía, y eso es algo bueno.

Aunque ahora Adriana se encuentra extraña, como fuera de sitio, se levanta pronto con una camiseta larga y muerta de frio se pone una sudadera gris, para que sentada en la encimera de la cocina, mientras desayuna un bol de cereales, en sus oidos no pare de retumbarle la misma pregunta ¿y ahora que?  
Ella que siempre pensaba en alguien, y cuando sonaba el despertador con su cancion favorita, lo que de verdad la hacia despertarse era pensar en el. Porque lo primero que piensas nada mas bostezar y separarte de las sabanas es en lo que de verdad quieres, y ahora en la mente de Adriana no habia nadie, todo blanco, y no tenia pensamiento matutino.

Pero se nos olvido el concepto importante de que hoy es Sabado, y estamos nosotras cinco, las de siempre, Sara, Sofia, Ana, Maria y yo, y eso supera a cualquier él en el que pensar por las mañanas.

(Y esque a ella la movia su sonrisa)

Todos tenemos dias malos. Dias que es mejor no levantarse. Dias en los que solo quieres llorar y llorar, que lo que te apetece es tirarte en la cama debajo de tres mantas con el jersey azul y las medias altas grises.
Dias en los que estas sola y en los que todo te sale mal. Que estas gritando en medio de un monton de gente y nadie te escucha, y lo que se te pasa por la cabeza y parecia facil, se vuelvo más complicado.

Matematicas. Me daba la vuelta para hablar la compañera de detras, esa anguistia que es sobrellevar matematicas a ciertas horas de la mañana (aunque en realidad siempre es dificil sobrellevar matematicas) Le tenia detras, a menos de un metro, y le escuchaba respirar. Mi corazon latia al ritmo de sus pulmones, y entre números, no podia evitar sonreir tontamente. El y su torpeza dejaron caer el nuevo libro que el profesor de Lengua nos mando comprar. "¿Adri, me lo pasas?" Y mi corazon ya no iba al mismo ritmo, se aceleró. Mi mano derecha sostenia ahora el libro y haciendo ademan de dejarlo en su mesa, él se apresuro y acazo mi mano. Sus dedos se alojaron en mi muñeca para que sus huellas dactilares recorrienran mi mano. Y las huellas dactilares no se borran de las personas que tocamos. Su piel contra mi piel, y su mano caliente transpasaba su calor a la mia. ( Y adios a prestar atencion a lo que quedaba de clase de mates)

Pero como ya es costumbre Adriana no para de darse hostias con la realidad, y al volver al mundo de los que no sueñan, una hoja de examen estaba en mi mesa, con un bonito cuatro a rojo. La siguiente hora, física, el examen de fisica que cayo en viernes, y otro cuatro. Y el aire me faltaba, y solo sabia desahogarme llorando. Porque hay miercoles en los que solo te apetece llorar, y este era uno de ellos.
Un miercoles en el que Adriana llora. Diego la dice que que bien que estan en clase juntos, pero cuando Adriana llora, Diego no la hace caso, porque dice que esta enamorado, pero no lo demuestra.
Porque el que hace caso a Adriana cuando llora era Manuel. Manuel que es un encanto.